Se conocen como alimentos formadores, a los que son fuente de proteínas que ayudan a la formación de músculos y tejidos, sobre todo en los niños y niñas. Una de sus principales funciones es la de proporcionar energía al sistema nervioso y al cerebro.
Ayudan a mantener normales los niveles de azúcar, colesterol y triglicéridos, además de su acción protectora contra residuos tóxicos que pueden aparecer en el proceso digestivo.
Los alimentos formadores transportan oxígeno a la sangre en forma de hemoglobina y, en las mujeres embarazadas, niños y niñas en crecimiento, tienen una acción defensiva, porque forman anticuerpos.
Pertenecen a este grupo la leche y sus derivados, huevo, pollo, res, cerdo, pescado, queso, yogurt. Los carbohidratos también lo integran, porque se consumen con mayor frecuencia por su bajo costo económico. Estos proveen mayor energía al organismo y algunas de sus fuentes son: el pan, pasta, harina, trigo, arroz, tortilla, cereales, avena sorgo, etc.
El Ministerio de Agricultura Ganadería y Alimentación (MAGA), por medio de los técnicos del Viceministerio de Seguridad Alimentaria (VISAN), brindan capacitaciones a las familias rurales, explicando por qué es necesario incorpora en su dieta alimenticia, alimentos formadores para una buena nutrición y también cómo hacer huertos familiares que garantizan el acceso a los alimentos esenciales.
Así el MAGA cumple con su objetivo estratégico de incrementar la productividad, la disponibilidad, el acceso físico y económico a los alimentos de manera oportuna (JG/ea).
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